Las sensaciones que más nos gusta sentir, son las que nos hacen pensar, las que nos recorren. Las que nos erizan la piel.
Las que nos da un lugar, siempre acompañado.
Un instante.
Las sensaciones que te da una sonrisa y ese abrazo.
A veces las sensaciones no son como queremos, ni todas buenas.
Hay sensaciones que duelen. Éstas suelen durar más aunque pasen solo una vez. Y si se repiten sufres el doble.
Mi sensación favorita la encontré en su olor.
Su olor me abriga.
Me traslada.
Él me hizo darme cuenta de los matices que tienen las cosas. Porque su olor me hace sentir todas las sensaciones juntas.
Duele olerte y no tenerte conmigo pero te siento recorriendo cada espacio dentro de mi.
Soy feliz oliendote mientras te abrazo y también con tu sudadera, mientras te espero en el aeropuerto. Mientras te veo tras la pantalla, mientras experimento como tu olor tiene poder para darme la fuerza que necesito para no derrumbarme al verte ir tras esa puerta.
Pero sobretodo, ese poder para enamorarme de ti, desde que te abracé por primera vez.
Tu olor quedó impregnado en mi piel.
Ahora se que las mejores sensaciones las descubro todos los días desde que estoy contigo, me las da tu voz, tu sonrisa... Todo de ti me llena.
El fuego que hay en mi corazón no deja de arder nunca. No lo apagues, amo tus incendios.
Eres la mejor sensación.