Cuantas palabras no dije, cuantas miradas grité.
Cuantos insultos me tocaron digerir, cuantas miradas lancé.
Ojalá los ojos siempre hablen. Porque ahí no hay mentiras ni verdades a medias.
Ahí puedes soltarlo todo.
Las miradas no saben guardar secretos. Las miradas delatan.
Las miradas con amor jamás tienen miedo a demostrar.
Las miradas desafiantes cortan más que cualquier cuchillo.
Pero hay miradas de amor que dan más miedo que cualquier arma.
Las miradas. Las hay perdidas y las hay firmes. Al igual que están en las que te encuentras.
Las miradas. Las de alegría. Mis preferidas. Donde hay sonrisas, donde hay vida.
Las miradas. Las que tímidamente cambian algo dentro de ti. La dulzura de una mirada inocente.
La indecisa, la que no descubres fácilmente,, la difícil.
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